劉明仁 以民族舞蹈演繹客家精神

【Reporteros Liu Yushan y Huang Meina / Informe de la ciudad de Nueva Taipei】En el escenario, los bailarines sostienen guadañas y representan la difícil travesía de la etnia Hakka a través del río Negro para colonizar Taiwán; levantan cestas de bambú […]
Este artículo, escrito por Liu Mingren, destaca el espíritu Hakka a través de la danza étnica.
La historia de la etnia Hakka es una de valentía y perseverancia. Durante siglos, han enfrentado desafíos y dificultades, pero nunca han perdido su espíritu luchador y su determinación de superar cualquier obstáculo.
En el escenario, los bailarines representan la travesía de la etnia Hakka a través del río Negro, un símbolo de los desafíos que enfrentaron al llegar a Taiwán. Con sus guadañas en mano, simbolizan la lucha y el trabajo duro que tuvieron que realizar para abrirse camino en una tierra desconocida.
Pero también hay un mensaje de esperanza en esta danza. Los bailarines levantan cestas de bambú, un símbolo de la cultura Hakka y su habilidad para adaptarse y prosperar en cualquier entorno. A pesar de las dificultades, la etnia Hakka siempre ha mantenido su identidad y su orgullo por sus raíces.
Esta danza es un recordatorio de la importancia de mantener vivo el espíritu Hakka. A través de la danza, se transmite la historia y la cultura de esta etnia valiente y trabajadora. Y al hacerlo, se inspira a las generaciones futuras a seguir luchando por sus sueños y a nunca rendirse ante las adversidades.
El bailarín principal, Liu Mingren, es un ejemplo vivo del espíritu Hakka. Él ha dedicado su vida a preservar y promover la cultura Hakka a través de la danza. Con su talento y pasión, ha llevado la historia de su pueblo a escenarios de todo el mundo, inspirando a miles de personas con su arte.
En un mundo cada vez más globalizado, es importante recordar nuestras raíces y mantener vivas nuestras tradiciones y culturas. La danza étnica es una forma poderosa de hacerlo, ya que trasciende las barreras del idioma y la cultura y nos conecta con nuestras raíces más profundas.
La danza de la etnia Hakka es un recordatorio de que, a pesar de los desafíos, siempre hay esperanza y fuerza en nuestra identidad y en nuestras raíces. Y gracias a bailarines como Liu Mingren, esta historia y este mensaje seguirán siendo transmitidos a las generaciones venideras, manteniendo vivo el espíritu Hakka para siempre.